La plaza de los Dolores estaba repleta de gente para esta siempre emotiva salida de la hermandad más "famosa" de nuestra ciudad.
Como siempre la Banda de Música de Torredonjimeno amenizando con sus sones el tradicional paso de la Virgen de los Dolores (el llamado "paso tosiriano"), calentando motores para la siempre completa Semana Santa de nuestros músicos que se recorren media Andalucía llevando el nombre de nuestra ciudad y coronándose como una formación muy importante en el campo musical cofrade.
El público acompañó a la Virgen de los Dolores, llenando cada rincón por donde pasaba y, como era de esperar, también llenó la iglesia de San Pedro.
Aquí fue donde yo me despedí (hasta el Viernes Santo) de la Virgen de los Dolores, ya que me quedé en San Pedro para presenciar la llegada del Stmo. Cristo del Amor y Silencio tras su restauración desde Úbeda (los mismos que han restaurado a Jesús Preso y el Cristo Yacente de la Virgen de las Angustias, el taller LEGNO Restauro, realizando también un trabajo magnífico sobre esta excelsa talla).
Y de esta forma comienzo el resumen de mi Semana Santa, que me ha llevado no sólo a Torredonjimeno, sino tras dos años de ausencia a Jaén y Granada, volviendo a Jabalquito y visitando por primera (y no única) vez a la ciudad cordobesa de Cabra.
2 comentarios:
Perdona pero la restauración del Cristo del Amor y del Silencio se acometió en Úbeda y no en Baeza.
Ha sido una equivocación. Me he dado cuenta esta mañana. Será corregido en breve.
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