Miércoles Santo (III): Preso de la Virgen del Rosario.

Sí, la Virgen del Rosario es una de mis debilidades, y aún más cuando una foto mía de Ella fuera la ganadora del primer concurso fotográfico de esta hermandad que me gusta tanto el pasado año 2011.

Hermandad clásica donde las haya, siempre tras los pasos de la del Huerto (algunos años con más corte entre ellas, otras con menos) yo la vi ya cuando entró en la carrera oficial. Jesús Preso y su casi inseparable AM "Jesús Caído" de Montoro llegó a la tribuna con "Caridad del Guadalquivir", una marcha que gusta mucho en la hermandad, aunque a mí no me llegue a llenar del todo.

 Como siempre, sus anderos trajeados portando el majestuoso trono con la para mí mejor talla de Cristo de Torredonjimeno (obra de Palma Burgos). Ese estilo malagueño inconfundible en nuestra ciudad, una cuadrilla que cumplía aniversario y que así nos los mostraron con una magnífica exposición fotográfica.

La agrupación cordobesa en su línea. Una formación musical de calidad que lleva ya varios años acompañando a esta talla, que luce de nuevo impresionante tras su acertada restauración del pasado año. Ya lo dije también en la Semana Santa de 2011.

Tras los pasos de Jesús llegó la Virgen del Rosario. La Virgen de las monjitas, que se despiden de Ella durante las horas que dura la procesión pero también nuestra ciudad tiene derecho a disfrutarla.
Sus anderos, tras el encuentro en la Plaza de San Pedro llegó a la Plaza de la Constitución, otra vez sin deplegar del todo sus varales (demostrando que a todas las cofradías le falta gente para llevar los pasos). Tras el manto de la Virgen, la Banda de Música de Torredonjimeno, que por primera vez en Semana Santa en su ciudad, demostró el por qué muchas son las cofradías las que suspiren porque les acompañe a sus desfiles procesionales.

El cortejo con bastantes nazarenos, tanto niños como no tan niños precediendo al paso de Jesús Preso y muchas mantillas acompañando a Ntra. Sra. del Rosario.

 

 Cuando aún no había llegado casi a la Tribuna, nos fuimos Pili y yo a cenar y tomarnos algo para coger fuerzas para seguir la noche. Una noche fría donde las primeras muestras de cansancio tras tres días intensos.
Tras comernos un buen bocata fuimos hasta la Plaza de Santa María. Allí se veía como la hermandad quería alargar el paso y así comerle unos minutos al reloj para que no llegaran a sus diferentes templos a altas horas de la madrugada.
En este punto acompañamos al paso de palio unos metros, desde dicha plaza hasta bien entrada en la calle Santa María. Siempre disfrutando del paso y de la banda, que tocó una marcha (para mí preciosa) como es "Mi Amargura".

Y en esta calle nos despedimos de la hermandad y de la Virgen hasta octubre, donde la veremos de nuevo en la calle en un procesión gloriosa, aunque llegamos a tiempo para ver la entrada de Jesús Preso en San Pedro, acompañado por mucha gente que esperó la llegada del paso.

 De esta forma terminó el Miércoles Santo, una jornada preciosa y de gran sabor cofrade en la ciudad, con dos de las hermandades con más arraigo cofrade en Torredonjimeno.